El Baby Shower llega con fuerza para quedarse y es que, todo lo que suponga fiesta…¡¡Nos encanta!!
No sé si es la edad en la que estoy, pero últimamente me río de las estadísticas en las que nos dicen que la natalidad está bajo mínimos. Debe de ser que estos del INE no se han pasado por mi grupo de amistades. Cada día tenemos un nacimiento nuevo, una embarazada más o algunos amigos buscando el ansiado bebé.
Yo, que ya sabéis que llevo la celebración por bandera, quería escribiros un post donde os contara un nuevo evento que cada día tiene más adeptos: el Baby Shower. ¿Qué es eso? Suena a «americana, ¿no? Pues bueno, muy desencaminados no vais. Se trata de una moda muy extendida en EEUU y que poco a poco va llegando también a nuestra zona.
Un Baby Shower, «Fiesta Premamá o Prepapá», no es más que una fiesta que se organiza para despedir el embarazo y dar la bienvenida al futuro bebé. Así, se suele realizar como un mes y medio antes de que la embarazadísima mamá salga de cuentas, siendo la ocasión perfecta para disfrutar con tus amigos o familiares más cercanos de un rato divertido antes de que tu vida cambie por completo, antes de que pases horas sin dormir y tu mundo gire alrededor de pañales y biberones.
Como en las despedidas de soltera, generalmente es una amiga o familiar muy cercano a la mamá la encargada de organizar el Baby Shower. De hecho, en la mayoría de ocasiones se trata de una «fiesta de chicas», aunque también hay Baby Shower conjuntos (que a mí, particularmente, me gustan mucho más). Básicamente se merienda y se le entregan a los futuros papis esos regalitos que le ayudarán con su nueva vida, pero todo de una manera muy original y divertida.
Y, claro, como toda fiesta que se precie, un Baby Shower tiene una serie de elementos fundamentales:
1. INVITACIONES
Fundamental que aparezca el nombre de los papis y del futuro bebé (si ya se sabe), el lugar y horario donde se realizará. Es común utilizar elementos representativos de los bebés para darle forma a la invitación del Baby Shower: biberones, bodys, chupetes…¡¡Todo muy acorde!!
2. DECORACIÓN
Como no podía ser de otra manera, se decora el espacio a utilizar con elementos alusivos al bebé, de forma que se usan globos, guirnaldas de biberones, artículos infantiles de cualquier tipo… Lo importante es crear un ambiente bonito e infantil. ¡Ojo! No es necesario ajustarse al rosa o azul. Hay todo un universo de colores y opciones también para la decoración de Baby Showers.
3. MERIENDA
Se suele montar una mesa de picoteo dulce y salado manteniendo un poco la temática anterior: los bebés y su mundo. Es fácil decorar la mesa con detalles infantiles: beber en biberones en lugar de vasos, utilizar topper con el nombre del bebé, darle formas infantiles a los alimentos…
4. REGALOS
Un Baby Shower es la ocasión perfecta para hacer entrega a los futuros papás de esos regalitos que le queremos hacer. De hecho, se puede poner un punto de recepción de los mismos y después de la merienda hacer la entrega.
5. ACTIVIDADES
No puede haber un Baby Shower que se precie en el que no haya algún juego para dinamizar el ambiente. Al fin y al cabo, se trata de celebrar la llegada de un niño, luego…¡¡volvamos a la infancia!! Realmente se trata de tematizar un poco típicos juegos o pruebas, centrándolos en el mundo del bebé. Algunos ejemplos muy comunes son:
- Adivinar el tamaño de la barriga de la futura mamá.
- Comer algún puré de bebé y adivinar qué ingredientes lleva.
- Carrera a ver quién da más rápido y mejor el biberón, haciendo algunos invitados de bebés.
- Inflar un globo a modo de barriga e intentar atarse los zapatos.
- Carrera para cambiar los pañales y vestir a un muñeco.
- Aguantar a hablar sin decir la palabra bebé.
6. DETALLE PARA INVITADOS
Como en otros eventos similares, también se puede obsequiar a los asistentes con algún pequeño detalle de recuerdo de ese Baby Shower. Aquí la imaginación y habilidades de cada uno juegan un papel importante, pero la temática: más de lo mismo.
Y así, mezclando todos estos ingredientes, conseguirás tener un Baby Shower inolvidable, que seguro que ayudará a recargar fuerzas para la recta final del embarazo a esos impacientes papis.
Y vosotros, variopintos, ¿habéis ido a algún Baby Shower? ¿los conocíais? No lo dudéis, si tenéis alguna persona cercana (o no tanto) a punto de ser papis, organizarle una fiesta de este tipo puede ser un auténtico regalo y una sorpresa inolvidable. En La Variopinta estamos deseando ayudaros a sorprender e innovar.